¿Te han dicho alguna vez, luego de abrazar a una persona, ¡que rico
abrazo!?
Yo he tenido varias veces esa interacción y, cuando eso ocurre, es que
le has transmitido a esa persona, que tal vez estaba pasando por un
momento difícil en su vida, energías positivas, de bienestar.
Según la Escuela de Medicina de Harvard, en el acto de abrazar, con
afecto, cariño, amor, estamos activando un tipo de hormona que
promueve sentimientos positivos. Ese tipo de hormona es la oxitocina,
que en la medida que aumenta en nuestro cuerpo, ayuda a disminuir
los niveles de estrés, de ansiedad.
Es tan real y efectivo este acto de abrazar que existen lugares en el
mundo donde las personas pagan por este gesto tan común en
algunas partes, pero tan escaso en algunas latitudes del mundo.
Como les he comentado en videos anteriores, la felicidad no se
compra ni se vende en ninguna parte, pero estas personas están
dispuestas a comprar un rato de bienestar. Triste, pero cierto.
Así es que ya sabes, si te encuentras con una persona que conozcas,
con la que tengas confianza, y la veas triste, estresada, ansiosa o
melancólica, no dudes en abrazarla con real sentimiento, te aseguro
que la estarás ayudando a recuperar su bienestar, su felicidad y en
retribución te estarás ayudando a ti mismo a ser más feliz.