Antes de explayarme en el tema, considero necesario definir qué entendemos por liderazgo. Si buscan mediante Google u otros buscadores que es liderazgo, seguro encontrarán cientos de definiciones expresadas de manera distinta, pero que en el fondo apuntan a lo mismo.
En lo personal me gusta definir liderazgo como el conjunto de habilidades que posee una persona, que le ayuda a influir en forma positiva..o negativa, sobre otras personas. Así es, positiva o negativa, porque desgraciadamente existen líderes negativos en todos los dominios que conocemos: política, empresas, organizaciones sociales, por nombrar algunos.
De acuerdo a lo observado en las últimas décadas, se aprecia una importante escasez de líderes capaces de conducir a sus países, empresas e instituciones de todo tipo hacia el resultado deseado.
Kancho Stoychev, presidente de la reconocida empresa internacional de encuestas Gallup, daba cuenta, en una entrevista que le realizara en febrero del año 2020 la emisora internacional de Alemania Deutsche Welle, que la calificación de los líderes en todo el mundo estaba cayendo en su evaluación por parte de la población en una crisis de prestigio y confianza. Y agregaba que la excepción la constituía Angela Merkel, Canciller Alemana a la fecha de la encuesta y el Papa Francisco y la razón de ello era que la gente prefería un enfoque reflexivo y medido, a lo que habría que agregar consecuencia entre lo que se dice y se hace.
Chile, al igual que los países de Centro y Sudamérica viven un clima de incertidumbre e inestabilidad política, social, cultural y económica, que requerirá de conductores y líderes eficaces que logren cohesionar a sus países y equipos. Gran desafío.
En el caso de las empresas, el fortalecimiento de los liderazgos y el alineamiento de sus integrantes con su visión, misión y objetivos estratégicos, y la generación de sinergia en los equipos de trabajo, será fundamental para alcanzar los logros que se desean alcanzar.
Al concluir esta reflexión, me gustaría exponer a modo de ejemplo a una de tantas buenas personas con los que ha contado el mundo. Se trata de Martin Luther King, líder que luchó en forma pacífica por los derechos civiles de la población de raza negra de Estados Unidos, quien en un discurso notable dijo: “I have a dream”…tengo un sueño que compartir, y con esta simple frase que llenó de contenidos inspiró a millones de personas para cambiar la segregación racial de su país. Gran ejemplo para respaldar la importancia que tiene contar con buenos líderes que inspiren a otros a impulsar, sin claudicar, una idea, un sueño o una misión. Los países, las organizaciones y las empresas que exhiben grandes logros han contado con líderes capaces de inspirar con su ejemplo y convicción a muchos.